Aquella noche la luna salió conspiradora,
con las ideas traviesas tras la cara oculta.
Y como buena mujer, buena embaucadora,
supo perderme donde debía.
Me prestó su sombra para cobijarme,
y al amparo del ron,
y la niebla de los bares,
vi tu verde entre blancos y negros.
Como buena mujer, buena embaucadora,
me ganaste con trampas sutilmente descaradas.
Y me dejé hacer cosquillas, queriendo,
en una costilla flotante que flotaba un poco de más.
Te diré que te delató la luna con su media sonrisa,
pero me dió igual.
Porque entre tan tierna piel de hada
nunca se hace demasiado tarde.
Historia, familia y lucha obrera
Hace 7 años
Si yo te contara que justo la mejor noche de mi vida no conté con la Luna, ¿me creerías?
ResponderEliminarY no, el texto es de W.H. Auden. Se llama "Paren los relojes". Es maravilloso.
Un abrazo inmenso.
No tengo nada nuevo que decir, me ha gustado y lo de siempre, pero nada nuevo.
ResponderEliminarBechis.
Claro que te creería Espérame, aunque quién sabe...lo mismo los influjos lunares tuvieron parte en aquella noche, precisamente por su ausencia...Un beso!
ResponderEliminarJo Min, ahora me siento repetitivo xD Un beso ;)
A pesar de tener ya unos cuantos prejuicios en lo que a lunas ingresadas en textos románticos se refiere, me entanta tu fragmento, Mr. Otra vez te sales. (:
ResponderEliminarJohn, yo tampoco me fío demasiado del asunto, pero aquella noche lo primero que hice nada más salir de casa fue "Dios mío, si sigue creciendo se va a caer y seguro que duele". Y después me di cuenta de un par de cosas gracias a que había una luna grande. Un abrazo caballero, un placer tenerte por aquí ;)
ResponderEliminarUi, estabas enamorado, eh?Y Desi no se enamora..
ResponderEliminarQué bonito, bicho =)
Quién ha dicho que me refiera a mí?eh?Bueh...
ResponderEliminaruno de los tuyos era, seguro
ResponderEliminarEh, a los míos no se les reconce tan fácil eh?
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