Esa sensación de perderse uno mismo.
Ese gotear de tus secretos, de tus sonrisas,
y descubrir que tus más oscuras complicidades
no son nada del otro mundo.
Que eres tan único como todos los demás.
Y al final otro acabará siendo tú,
y tú un maniquí con la cara emborronada.
Gris. Anónimo.
Pero sigue vibrando de todas maneras.
Cada gota de lluvia que caiga sobre ti será tuya.
Y de nadie más.
Historia, familia y lucha obrera
Hace 7 años
Buenos versos, me recuerda a una de las ideas que se exponen en El Principito (ya sabes, con el jardín de rosas y el zorro, en la Tierra). Sabes transmitir muy bien el mensaje de los versos.
ResponderEliminarComo siempre, encantado de leerte, saludos.
la próxima vez que llueva iré a dar un paseo (y creo k será no tardando mucho... jeje)
ResponderEliminarmucha suerte con tus exámenes!!
y a ver si te dejas ver algún día este verano (yo andaré por madrid ^^)
La curiosa paradoja de las personas; todas iguales, todas únicas.
ResponderEliminarpero waiting qué exactamente?
ResponderEliminarMe has recordado a esta canción increíblemente:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=RpanipkxbwA&feature=related
Cendero, has tocado uno de mis puntos débiles. Siempre he creído que deberían hacer una asignatura sobre el Principito ;)
ResponderEliminarEsther, lo mejor de que llueva es mojarse. Eso sí, tú ven a Madrid y no me verás el pelo, yo no pienso pasar por aquí en todo el verano!:P
Lucas, lo extraño es eso de "eres diferente, igual que todos". No sé, algo falla por ahí...;)
Ladrona, esperando a que llueva, por supuesto (ja).
William, no conocía a este tipo!Sí había visto a varios que tocan de este palo, haciendo un tapping que prácticamente compite con un grupo entero, pero wow...
Un placer teneros por aquí!
está diluviando!
ResponderEliminar(si está bien que llueva, que no termino de tenerlo claro..)
tú me entiendes ;)
Tú tranqui, que llueva no debería ser malo. Sólo espero no pillarme unas anginas (otra vez)!:P
ResponderEliminarNuestra realidad es difícilmente comprensible por contradictoria. Por un lado, la certera evidencia de que mis alegrías y dolores son propias de todo ser humano. Por otro, la certera evidencia de que nadie más que yo podrá sentir ésa que es mi alegría y ése que es mi dolor por debajo de mi piel. Y, por tanto, un fondo de misterio inexpugnable por debajo de lo que sabemos común y compartido. Porque, ¿cómo sentirán los otros sus alegrías y dolores? ¿Exactamente igual que yo? Ah, nunca podremos saberlo, encerrados en la jaula de nuestra interioridad sensitiva. Sé cómo siento una gota de lluvia sobre mi piel. Cómo tú la sientes, eso está más allá de mi conocimiento.
ResponderEliminarUn saludo
Antígona, llevas toda la razón del mundo. Siempre me he preguntado si de verdad alguien entiende lo que quiero decir cuando digo "me siento solo", "estoy contentísimo" o "no te imaginas como duele".Creo que es la única barrera (si puede llamarse así) que evita que piense que todos somos absolutamente iguales.
ResponderEliminarHm...cambiarse por alguien durante...no sé, una semana. Sería interesante. Pero lo mismo volvemos muertos de miedo. O del asco, ¡vete tú a saber!
Un placer tener por aquí!