lunes, 17 de noviembre de 2008

Volar sin alas

Supongo que ahora que me he callado,
debería empezar a escucharme.

Asi que aprovecha este momento de silencio inesperado
y rómpeme la vida.
Y párteme la muerte.

Y con los pedazos que te encuentres,
haz una hogera en el lago,
y déjame inhalarme hasta los huesos.

Báñame en mis ascuas,
que me queme bien de mí.
Astíllame los dientes.
Sécame los miedos.
Dame de comer mis errores.
Que se me indigesten.

Despega lo poco de realidad
que quede en mi piel,
y arrójame por el acantilado.
Porque voy a intentar volar sin alas.

11 comentarios:

  1. Duro como siempre, pero me ha encantado.

    ResponderEliminar
  2. No sé si serás consciente, pero este texto enamora. Me encanta.

    ResponderEliminar
  3. Vaya, pues muchas gracias. La verdad es que os tenía miedo...

    ResponderEliminar
  4. Y yo pregunto... ¿cual es el germen que ha provocado esta entrada?

    ResponderEliminar
  5. Pues no lo se Jezabel, la verdad es que no había ninguna situación excepcional. Iba en un tren, hacía mucho que no escribía, y salió eso.

    ResponderEliminar
  6. Otras, tío... Te estás tetrificando... Creo que necesitas una mariscada.

    Barbija: ve pronto a Madrid, por favor.

    ResponderEliminar
  7. Peloteos a parte, Desi cada vez me mola más. Ya se ha declarado decimonónico y se ha vuelto medio siniestro. Sigue así y entre Barbija y yo te hacemos una entrada loatoria a la altura de la de Patrick.

    ResponderEliminar
  8. Gracias Eugenio ;)

    Kapi, yo estaba tetrificado ya desde hace mucho. Lo que pasa es que hacía un montón que no escribía en este plan.

    Jez, yo me uno a la campaña Desilusionista Mola :P Me gustaría ver cómo sería esa entrada, si se parece a la de Patrick iba a echarme unas risas seguro.

    ResponderEliminar